En una defensa monolítica del gobernador Gildo Insfrán, el senador José Mayans acusó a la oposición de buscar “un muerto” en Formosa y descalificó a los manifestantes que protestan desde el viernes contra las rígidas medidas sanitarias impuestas en la provincia y que fueron reprimidos por la policía. “Fue una especie de intifada porque llevaron piedras”, dijo.
Mayans preside el bloque del Frente de Todos en el Senado y es un hombre identificado públicamente tanto con Insfrán como con Cristina Kirchner, principal aval de su designación en su actual cargo. A diferencia de los funcionarios del gobierno nacional que marcaron cierta crítica a la “violencia institucional” en Formosa, el legislador le echó la culpa a la oposición y a los manifestantes.
“Hay un grupo importante que hizo esa manifestación pacíficamente, no hay ningún problema. Pero hay otro que fue a atropellar el vallado de la casa de gobierno. Hubo más policías heridos que manifestantes. Uno está internado”, enfatizó en declaraciones a El Destape Radio.
Le apuntó especialmente a Patricia Bullrich, que viajó a Formosa para apoyar a quienes se rebelaron contra Insfrán. “La oposición encontró una oportunidad en la pandemia después del gobierno de Macri”, dijo. Y añadió: “Estos grupos que acompañaron a Macri y el desastre que hizo nunca aceptaron la decisión popular. Están haciendo actos políticos. Nuestras agrupaciones no van por seguir el juego de ellos. Están buscando tener un muerto”.
/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/lanacionar/XZROL7PQABAPFPG3ORGMVFEQGA.jpg)
Defendió, además, el regreso a la Fase 1 de la cuarentena que desató las protestas, protagonizadas principalmente por comerciantes que exigen permiso para trabajar. Mayans dijo que los médicos que asesoran al gobernador recomendaron volver a las restricciones máximas “hasta completar la vacunación”. Sugirió de ese modo que las medidas duras llegaron para quedarse.
“Hoy tenemos 226 casos activos y tenemos 20 muertos en lo que va de pandemia. Paraguay tiene un sistema que ha colapsado y eso nos preocupa. Formosa es una especie de muralla de contención para todo el país”, señaló.
Se quejó además de que los medios nacionales (”que son hegemónicos”, dijo) “están distorsionando” la realidad, al decir que el 60% de los formoseños vive del Estado: ”De los 46.000 empleados públicos, que les parece una exorbitancia, 23.000 son docentes, 6000 fuerzas de seguridad y 6000 al sistema de salud”.
LA NACION